(Foba) …proa al ‘zéfero’

Por Alvargonzález; 24 de junio del 2002

Anécdota 1: Don Cliserio, compañero en una de tantas andanzas laborales que he tenido, solía decir: “de chiquitos, muy bonitos; de grandes, bien tontitos…” Aplica en el caso presente: el proyecto, ‘bienbonito’,  y la hechura allí, cosa ‘bientontita’…

Anécdota 2: le decíamos ‘El Chamuco’, ingenioso compañero de la secundaria. Ya pintaba para lo que fue: malabarista financiero. Decía -con lógica irreprochable-, que cuando grande iría a un banco a pedir prestado para hacer un buen negocio. “Los bancos te prestan lana si les demuestras que vas a hacer un buen bisnes. Yo les voy a pedir prestado pa’ comprarles el banco. ¿No es buen negocio un banco?”. Créeme que El Chamuco creció y banco compró con dinero de banco en aquello que fue la ‘reprivatización’ ¿Te acuerdas de la maniobra? Si te contara lo que El Chamuco me contó de ella… ¡Cosa linda! (Quizá  te daría Aspe saber lo que hizo Asco, o viceversa).

Realidad 1: allí está, y fue pensado como ‘quesque’ ‘edificio inteligente’, de buen tamaño y al más puro estilo ‘jiuston’. Sería, de acuerdo al proyecto, sede de magnífico banco reprivatizado. Nada malo en ello, en el proyecto, pero todo malo en la realidad: la zona, como tantas otras en la ciudad, está asfixiada por la malhecha ecuación ciudadano-auto. Te digo: ‘bienbonito’ pero ‘bientontito’ proyecto. Abrirlo sería asfixiar la zona. ¡Fatídico!

Realidad 2: buen negocio resultó comprar bancos con dinero de los bancos, pero ya no sobró para otras cosas sino para vender bancos huecos  a precio alzado -como el edificio-.  Allí en venta, con su (foba) …proa ‘rascaceleste’ y repitiendo el estribillo: “Ya lo compré, ya lo vacié, te lo vendo  ‘suavepatria’”…

Realidad 3: sin ceros no habría sinceridad bancaria. ¿Ceros? Cuidado con ellos, porque son el cimiento de las ciencias financieras y el nombre de tan maravillosa abstracción procede del árabe ‘zéfero’ que significa ‘la nada’ o ‘vacío’. ¿Quién dijo aquello de que el banquero sólo tiene dos amores verdaderos: a los dineros y a los muchos ceros? Las palabras no se equivocan: ‘zéfero’ o la sólida fragilidad del sistema financiero. Pregúntale a Argentina: tan vaciado país… ¡En cero!

Conclusión: en pleno Chapultepec el edificio podría ser convertido en el gran  monumento al ¡‘cero’! y sus peligros financieros.

No es feo el edificio, lástima que sirva ¿para qué? ¡Zéfero!

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Estamos a punto de cancelar el evento planeado para el tercer aniversario luctuoso de Álvaro González de Mendoza. Es una pena, ya que pensábamos compartir contigo todo el texto de manera digital (ya que es la opción menos costosa). Pero como no te apuntas como lector, auguramos poca asistencia al evento y difícilmente rescataríamos lo invertido. En nuestra cuenta bancaria que existe desde hace varios meses, tenemos la fabulosa cantidad de 150 pesos donados por una sola persona, nuestra amiga Alicia Granero.

En los eventos anteriores, hemos puesto a tu disposición el audiovisual del 35 aniversario como ‘trepantenas’ de Álvaro González pidiéndote una cooperación, pero no creas que ha sido el gran negocio: unos pocos fueron generosos, pero la gran mayoría no pasó de los veinte pesos, hubo quienes incluso nada más nos dieron tres pesotes. Quizá su salario no les da para más, quizá no valoran en más nuestro trabajo: aún así se les agradece, pero de poco nos sirve. Para no ir tan lejos, este espacio en internet genera gastos que cubrimos de nuestros propios bolsillos. ¿Seguimos? Allá tú.