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Eleuterio

Por Alvargonzález, 3 de marzo de 2004

Hay una cuestión que quizá debes ayudarme a resolver: ¿cuántos olvidos contiene La Historia? El asunto tiene tintes de paradoja y por aquello de la ecuación Historia-Memoria, pero tal vez aquello lo enuncie como simple pretexto para justificar que en febrero olvidé decirte algo. ¿Oíste hablar del Dr. Eleuterio González? José María Eleuterio Raymundo González Mendoza, para más señas y de quien ya te he dicho algo, mas siempre hay que aprovechar la oportunidad para añadir más pinceladas luminosas a su retrato hablado.

En efecto, fue en la última semana de febrero del 813 cuando nació en Guadalajara el que asumiría una dimensión formidable en el desarrollo de su quehacer profesional. ¿Más paradojas? Nacido en Guadalajara e iniciada su carrera en la ciudad, aquí nadie le recuerda pues fue en Monterrey donde quedó la profunda huella de su valía humana; y con toda su grandeza, su nombre quedó inscrito en la historia de Nuevo León simplemente como “Gonzalitos”. Tal cual.

La guerra de independencia cobró la vida del Capitán Matías González, y así de menos de dos años, Eleuterio quedó huérfano. En la adolescencia se inició en el estudio de los clásicos, en el seminario, pero a los 17 años el encuentro fortuito con Fray Gabriel Ma. Jiménez, le da un rumbo definitivo a su vida: sería médico. Fue el enfermizo Fray Gabriel quien en busca de un clima más sano (¿hay clima más sano que el de Guadalajara?) le pidió que le acompañara a San Luis Potosí y allí los conocimientos empíricos del joven tomaron el rumbo de la academia. Cuando el fraile se muda a Monterrey y con él su asistente, éste lleva ya en su bagaje un certificado -cédula-, de médico. Es tan joven que el Obispo Belanzaurán le llama “el niño médico” y desde entonces todos le comenzaron a llamar Dr. Gonzalitos, luego de dar muestras de su capacidad. Estamos hablando de 1833-1834. A poco de estar en aquellas lejanías de su ciudad natal, percibió una carencia notable de médicos, instituciones hospitalarias, boticas y sistemas sanitarios; no solo en Nuevo León, sino en Tamaulipas y en lo que era el territorio de Coahuila-Texas. A eso se abocó decisivamente: a la creación allá de toda la infraestructura médico sanitaria y esa sería su aportación vital: la fundamentación en medio de todas las vicisitudes del siglo 19, de los modernos sistemas de salud en aquella norteña región.

Político por necesidad, desafortunado en su vida sentimental -conocido político que tiene nombre de calle y republicana fama, le quitó a la mujer-, su epitafio en el mismo Hospital Gonzalitos sintetiza su vida: “Sublime en la caridad. Eminente en la ciencia. Excelso en la enseñanza” ¿Se puede aspirar a ser más? Enorme fue el tapatío Gonzalitos.

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11 comentarios en «Eleuterio»

  1. EN EL LIBRO DE José Eleuterio González, Benemérito de Nuevo León POR EL PADRE AURELIANO TAPIA MENDEZ Y CON COPIA DEL ACTA DE NACIMIENTO DEL BENEMERITO DICE QUE SU NOMBRE ES JOSE MARIA REYMUNDO ELEUTERIO GONZALEZ MENDOZA ( REYMUNDO ) PARA LA CIENCIA UN LUMINAR, PARA LA JUVENTUD UN TESORO, PARA LA HUMANIDAD DOLIENTE UN GENEROSO Y TIERNO CONSUELO Y PARA MONTERREY UN JUSTO TITULO DE ORGULLO

  2. Oh, con eso del fuerte centralismo de la mesa central pues si, ahí ta. Disculpen el error de omisión. El Hospital Infantil de México Dr. Federico Gómez está en la mesa central y es el de las notas relevantes en la salud de los mexicanitos, es de asistencia pública porque así lo quiso su fundador y cuenta con los principales adelantos tecnológicos (uno de sus patrocinadores más queridos es aún Mario Moreno “Cantinflas” cuyo hijo sigue). Nos escri vemos en más Alvar.

  3. Muchas veces se tiene que salir de Guadalajara para poder hacer obras de progreso, el mejor Hospital Infantil de la república también fue iniciado por otro médico tapatío ilustre, el Dr. Federico Gómez hace más de 60 años. Parece que como en las casas se tiene uno que salir para tocar la puerta para que le abran a uno. Magníficos ejemplos los que Alvar nos da.

  4. MARTHA ELENA LUNA SALAZAR

    ¡HOLA,SALUDOS A TOD@S!
    SABEN QUE ME ENCANTAN LOS ESCRITOS Y HABLADURÍAS DEL VALLERO Y CHEQUEN COMO QUEREMOS A GUADALAJARA…
    AGRADEZCO EL COMPARTIR

  5. He estado en Monterrey trabajando, cerca de la Avenida “Gonzalitos”, y nadie en aquella ciudad me pudo explicar a ciencia cierta quien fue “Gonzalitos”; un tapatio preguntando en aquella ciudad por otro tapatio, jaja, ilustre y desconocido, aunque también allá, mucho más acá…..

  6. Marco Antonio Guillén Chávez

    No cabe duda Alvar era un paladín de dar a conocer vidas desconocidas que no por ello fueron menos importantes, pero que a la soberbia de este sistema lucrante no le ha interesado dar a conocer por estulticie mental.

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