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Prestaciones

Por Alvargonzález; 9 de septiembre del 2002

Mírala que fea no es. Para definir su estilo tendríamos que llamar a espectadores expertos en cuestiones arquitectónicas, lo que me da entre pereza y bostezo. Mejor dejo a tu albedrío (¡paf!) el ponerle etiqueta estilográfica a la finca que te muestro. Pero en algo podemos salir de acuerdo: los usuarios de la casa seguro no podían decir “no hallo la puerta”, pues puertas, muchas tiene. ¿No te intriga saber por qué tantas?

Un día camino al ahora Hospital Fray Antonio Alcalde, de pasada mi padre me contó la historia de tan respetada finca que allí está. Por si no entendiste la clave, la calle es Hospital y lo de ‘respetada’ lo digo porque no la demolieron pero ¿respetable? Mucho.

Sucede que en 1888 Guadalajara inauguró la modernidad industrial. ¿Cómo? Dando la bienvenida al ferrocarril que Don Porfirio mandó instalar con fines de vertebración territorial. Ya no sería preciso gastar largos 12 días entre tumbos y sobresaltos de diligencia para ir a ese México situado en el altiplano central. Las mieles de la revolución industrial por fin comenzaban a salpicar a la suavepatria, y el hecho de que llegara el ferrocarril a la ciudad representaba un tirón formidable y progresante.

Pero recuerda que desdendenantes y en materia tecnológica somos más cabús que máquina, y expresado así en términos ferrocarrileros; vamos más a remolque que jalando el convoy. Así la proeza tecnológica de trazar los carriles de fierro y de la instalación del equipo, correspondió hacerla a ingenieros y técnicos venidos del más allá. ¿Extraterrestres? En cierto sentido sí, pues fueron empresas norteamericanas a las que se contrataron para marcar dónde las manos mexicanas debían poner durmientes y clavar los rieles.

Empresas con alto grado de conciencia sobre el bienestar de sus trabajadores, capataces de la magna obra. Así para fines de entretenimiento y como prestación empresarial -que no era cosa nomás de venir a trabajar acá, lejos de casa y a aburrirse-, construyeron el simpático edificio en un lugar discreto (aquello en el siglo 19 era un andurrial urbano) con un uso específico: prostíbulo. Tal cual. ¿Ahora entiendes el por qué de tantas puertas? Porque era una casa de entrada por salida…


Más de Alvargonzález en; www.gatofuentes.com/ ‘escritos de amigos’.

Venta de los ‘Cincuenta Recuentos’ con Mario o Fabián en el puesto de periódicos ubicado en Américas y Morelos. Abierto todos los días de 8 A.M. a 9 P.M.


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5 comentarios en «Prestaciones»

  1. Solo Alvar atina a satisfacer mis curiosidades insospechadas, pero me surge otra, ahora que poner durmientes y clavar rieles no es negocio próspero, ¿qué prestación tendrá esa casa?.

  2. ¿Como sentian y pensaban esos extraterrestres?
    La película de Fizcaraldo de Herzog me da idea como eran esos tiempos. Se menciona a Diaz y a Alcalde ambos personajes marcaron rumbo a esta ciudad.

  3. Marco Antonio Guillén Chávez

    Mira que mi Amigo Maestro nunca deja de ser oportuno con su inculcanda repetenda. Yo tenía mucha curiosidad por saber algo de la finca referida desde hace 35 años, pues pasaba muy seguido por ahí. Ahora, con lo que aquí nos relata, queda revelado lo que era un misterio para mi que no me quitaba el sueño pero que sí tenía mucha curiosidad por saber. Cuando pase nuevamente por esa casa, creo que la miraré de diferente manera y querré saber más cosas. Nunca es tarde para saber lo que pasó más temprano.

  4. Nuevamente infinitas gracias por la delicia de recibir estas lineas, es increible primero como puede uno enviciarse de tan buenas lecturas y segundo que ese vicio nos tenga atentos al correo como novios separados: ya tienes la carta que acaba de llegar y ya estas esperando que te llegue la siguiente carta…Gracias¡

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